Quise llorar… y lloré… hubiera sido algo erróneo querer llorar, no hacerlo, y ahogarme por dentro… quise abraZar la soledad… y la agarré… tanto… que de ella me enamoré… quise aullar… aullar tan fuerte que la Luna cayera sobre la Tierra y en un planeta nuevo se fundieran… entonces, me convertí en lobo… quise apostar
Esa noche mis únicas palabras fueron «Yo no he hecho nada»… las repetía una y otra veZ, mientras estaba en la cama, con las sábanas cubriéndome hasta la cabeZa… no dejé entrar a nadie mientras mis lágrimas recorrían el camino que ya habían abierto por mi cara, ese surco, que queda, y que las lágrimas
Te beso… entre los pequeños momentos en los que no deseo estar aquí… en estos momentos, te beso… recorro dulcemente y perfilo tus labios hasta que nuestras lenguas se entrelacen y se pierdan con nuestras miradas… no cierres los ojos… quiero verte y que me veas mientras poco a poco emigro a tu cuello y
Tras un pequeño espejo… miro mi cara, y el reflejo de un ojo casi cerrado e imperfecto… me dice que no duermo mucho tiempo, por las ojeras que le dan un abraZo eterno… no sé por cuanto tiempo, mi insomnio podra con mi cuerpo… no sé por qué siempre intento robar horas a los sueños…
Hoy no tengo tiempo, y ni siquiera lo quiero, estoy cansado, me siento muerto, camino mirando el suelo, y me siento indefenso… miradas que se clavan en mi cuerpo, hacen que me ponga nervioso, y mis ojos estén alerta de todo… en todo instante, el tiempo. Hoy no quiero ser yo, soy el diablo, que
El reflejo de tu cuerpo, en las pupilas de mis ojos, significa lo bello… que es tu cuerpo cuando lo ven mis ojos. Siento que necesito desaparecer de este mundo, adentrarme como despojo en el murmullo humano, donde no soy más que uno que camina solo. No tengo miedo a lo que puedan pensar de