No existe juego, no hay verso, tras, todo dolor, que queda atrás. Piensas que sabes más, yo creo que pierdes trozos de cerebro cada vez que le das al play al hablar. Prefabricado calamar, no sabes nada y encima vas, de myor rey de esta ciudad. Aprende a callar, que así no estropeas tu vida al andar. Que las caídas duelen y tu no sabes más que romperte huesos, a cada paso que das.

Estoy cansado, de explicaciones vanas, de quebraderos de cabezas vanales con solución simple. Hecho, carece de respeto y mi dolor, cae en textos. Yo no encuentro, lógica a tu vida, pero así me replanteo tu misiva. Tal vez estés ahí para morir y rellenar otras vidas. Me niego a pensar, que en mi mano no está mi vida. Tan sólo es cuestión de creer en ti y no en nadie más, porque en esta vida no hay opción para más.

El silencio será mi calma, tu muerte parte de la vida, y mi vida un continuo respirar, sin parar y no dejar de andar. Si caemos levantaremos tantas, o más, veces hasta que nos dejes seguir nuestro camino. Y no hay dolor, o hay tanto que estoy acostumbrado a llevarlo mientras seguimos caminando. La muerte queda como parte de la vida, y una, y no más… tienes que aprender a disociarte, a separarte a verte desde fuera y pensar en tu mierda de vida, que se te presenta inevitable. Tu presente es, y no puedes cambiarlo. O eso crees, porque tu pasado ya es mucho tiempo y no te quedará mucho más tiempo por hacer.

Después vendrá el arrepentimiento de miles de millones de segundos perdidos que quisieras recuperar luego… y ya no tiene remedio, será tu fin, a manos de tu propia decisión… no vengas a buscar cabezas de turco que cortar para salvar tu culo, y aliviar tu conciencia.

Cada cual hunde sus pies hasta las rodillas para que vengas tú ahora a montarte encima…

Mode: Vida es vida, respira
Listening: Hablando en plata – El castigo de los débiles es…