Una opción más, no hay marcha atrás, ante la pasividad. Dos actos, incontrolados obstruidos ante actos apáticos siendo armarios inertes plantados. Tres, versos, tres, repetidos con estrés, entre espacios sin interés, soy yo, del revés. Cuatro quedó roto, un día que caminábamos, antes de hablar algo. Todo roto en pedazos, rezagado en mis pasos, odiando
Despierto otra vez, perdido entre relojes esperando un amanecer. Versos susurros, perdidos en mis sueños, y algo perdido por mis adentros. Quedo, tras el eco, eco… eco… eco… Quedo, tras el silencio… . .. … muero. Vivo, por dentro, vuelto, ahora de fuera a dentro pues no quiero. Y lejos, tan cerca te creo, que
Más allá de mañana habrá otro mañana. Más allá de tus besos quedarán lágrimas. Y en la ausencia, serás consumido poco a poco por el tiempo. Al final del camino no hay nada, y nada seguirá siendo el final, tras la verdad, las lágrimas se derraman, cuando ya no puedes cambiar ese final. Efímero seré
Escurriéndome por las mejillas… Con la mirada vacía… Con el vacío por compañía… En suspenso, la vida. Mode: Mañana el teórico del coche… Listening: Coldplay – Lovers in Japan
Y es aquí cuando llego, cual drogadicto a su dosis de metadona, golpeando venas mientras la mirada se pierde entre luces de noche. Invadido por una eterna tristeza, muriendo en vida, viendo pasar los días. Hasta el tiempo respira, cuando mi mirada queda pasiva, perdida en su pérdida. Sin razones aparentes, pero tantas a escondidas.
Letras con diente rápido, personas con pies en la cabeza caminando, con las palmas abiertas… Depresiones de una vida llena, de canalizaciones hacia una ciénaga… La vida llega, más allá del conjunto de pensamientos que balbuceas… Y en la actitud desesperas, en el luchar de batallas a solas, te dañas cuando tropiezas, en el mar